Hora de redefinir el éxito

El éxito, como concepto utilizado de manera cotidia­na, define muchos de nuestros objetivos, y como nuestros obje­tivos definen nuestras estrategias y enfoque de tiempos y esfuerzos, el éxito se vuelve una guía muy fuerte en nuestra vida. Sin embargo, usamos el concepto de manera tan automática y espontánea, sin darnos cuenta que su uso define vidas a nuestro alrededor y la nuestra. Hemos sido irresponsables con el uso cotidiano del concepto éxito.

Desde niños fuimos programados para pensar que el exitoso era quien traía el carro más nuevo, quien se graduaba de la mejor universidad y conseguía trabajo en una multinacional, quien lograba hacerse rico a como diera lugar, incluso corrompiendo. Si nuestros seres queridos y maestros admi­raban al rico, al poderoso, al de la empresa grande y al que aplastaba a sus competido­res, sin duda, como aprendizaje automático, crecimos con esos deseos, mismos que también representaban el “camino” para ser admirado. En contraste, somos capaces de entrar en depresión si no alcanzamos los indicadores de éxito que otros han definido en automático.

Leer más