Valoramos eso de lo que carecemos

El ser humano valora muchas cosas, sin embargo en muchas ocasiones ni cuenta se da de lo que valora y menos por qué las valora. Valoramos la familia, la pareja, la salud, el dinero, el trabajo, las cosas de calidad, la educación, una tarde de sábado viendo un partido de fútbol y tomando una cervecita fría. Pero no hemos aprendido a valorar todo esto disfrutándolo, sino careciendo de ello; así es, valoramos las cosas cuando carecemos de ellas, cuando nos faltan.

Tenemos pareja, nos la pasamos peleando con ella, y cuando finalmente nos termina, comenzamos a necesitarla, valorarla más. Tenemos trabajo, pero no nos gusta e incluso lo criticamos, cuando nos despiden porque no damos el 100% comenzamos a valorarlo y extrañarlo. Incluso cuando tenemos a nuestros padres y hermanos los aprovechamos menos de lo que desearíamos hacerlo cuando mueren o nos mudamos de ciudad.

Leer más